Dada la estructura de la empresa no va a ser necesario la adquisición de inmobilizado ( herramientas, vehículos industriales, etc ) por lo que tampoco va a ser necesario, al menos de momento, tener préstamos con entidades financieras. Si creo necesario en cambio tener una cuenta de crédito para disponer de suficiente liquidez para realizar los primeros pagos hasta que lleguen los primeros ingresos y también para poder hacer frente a las diferencias que suelen existir en los plazos de cobros y pagos.
En cuanto al gasto de personal, únicamente la empresa debe asumir mi salario que actualmente debe ser por ley 36.000€ anuales.
Como he comentado en anteriores entradas al blog, la oficina estará ubicada en mi vivienda por lo que no genero gasto de alquiler.
Como gastos generales hemos contemplado la adquisición de equipos ofimáticos y pequeño material de oficina.
En la confección del plan de tesorería he considerado que los primeros meses van a ser de trabajo propio y no será hasta transcurridos 5 ó 6 meses cuando empezaré a emitir las primeras facturas de los trabajos ejecutados.
En las casillas de final de año, en el que se indica proveedor-cliente, he imputado las cantidades que a final de año considero que no habré cobrado de clientes y que no habré pagado a proveedores.
Respecto a la partida de tributos, he considerado las retenciones de IRPF que se deben practicar en mis nóminas y el pago del correspondiente IVA.
Siguiendo los principios de prudencia y tal y como está la situación económica actual, he optado por esta estructura de empresa. Si en un futuro veo que la empresa adquiere estabilidad y viavilidad se podrán ir adoptando otras medidas.
